Ay triste corazón
lleno de remiendas
colmado tantas veces
de malezas,
triste corazón
como es que dentro
cabe tanto dolor
Alma mía
flor marchita
le juro que no quiero lastimarle
talvez sufrir es el precio
de la dicha de amarle
Sufro en carne viva
cada latigazo
que me da el presente y el pasado
aun cuando en sus brazos
siento que yo estoy volando
Y esas alas, que puso en mi
aquellas que me hicieron subir
arriba, allá, volar tan alto
alas mías, cuantas veces se han roto,
y mi vuelo cuantas veces ha cesado
a penas aprendo a volar,
apenas intento alcanzar
aquello que en la sima deje
Ya no vuelo tan alto
tengo miedo a caerme de nuevo
prefiero sencillamente
sobrevolar la tierra
a caer desde la sima
y partirme el alma
Hoy mi volar
no es tan alto como siempre
es el dolor que el alma siente
es mi corazón roto,
llena de tantas lagrimas
es el peso que me causan los pesares
que no me dejan volar como antes
Ya no le caben mas remiendas al alma
mi corazón esta exhausto de operaciones
¿cómo puede volar un ángel
si sus alas rotas están enfermas?
como puedo volar como antes
si mi cielo, que es amarte,
se nubla tras mis males
Hoy me duele el alma,
al igual que ayer, al igual que antes
no se si será pecado
sentir mi corazón quebrantado
hoy me duele todo
y me abraza el sufrimiento
mi ser es un solo lamento
Dígame usted
con que fuerzas vuelo alto
si estando en la sima mi alas cortaron
y hoy mientras sobrevuelo su cielo
lastiman mi vuelo
estoy enfermo, lleno de heridas
y vendas, cocido hasta los tuéstanos
hoy estoy MAL y no es secreto
prefiero caerme desde el suelo
que subir a la sima
y caerme desde arriba