Al mismo ángel

Hoy extrañe hablar contigo al teléfono y hoy estuve junto a ti, hoy me senté al lado de tu risa, y mi alma llego a vestirse de feliz, hoy en tu mirada literalmente me fundí, y en tu rostro de ángel me encamine al cielo, hoy te vi y me tope con tu risa, esa que casi idolatro, esa de la cual tanto hablo, hoy te vi y escuche tu voz, y no fue a través del teléfono, pues estabas ahí, tan cerca de mi, que paralizabas el todo del cosmos hasta hacer de esos instantes eterno, hoy te vi, de nuevo, y hoy volaste hacia mi, tú ángel de tanta vida, que me llenas de vida. No se como es que todo lo que haces me llena tanto, tu pareces ser un canto, tan sublime como santo. Que esta melodía no halle final, vente conmigo hasta donde no acabe este sueño, lléveme en sus alas y abrigue esta quimera, hágale eterna, no deje que envejezca, llévela con usted como si se tratase de una prenda, Ángel le ruego no se aleje de mi espacio, no vaya ser se marchite, quédese aquí, y obvie los relojes y detenga el tiempo como solo usted sabe, cierre los ojos y prosiga el camino, de pronto yo también le sigo, muéstreme el sendero e iré tras de usted, como si fuese su piel, iré tras de su risa y haré de sus alegrías mi felicidad, déjeme quedarme y quédese usted hasta que el sol bese la luna, hasta que el mar se recueste al universo, hasta que todo lo efímero se haga eterno.

Juan Antonio
14 Feb. 2006
1:22 AM